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CONCORDANCIA DEL CARÁCTER DE DIOS – SAMUEL EDELSTEIN
redentor (libertador, perdón, salvador)
Gaal (42/98)
(Éxodo 6:6) 6 Por tanto, di a los hijos de Israel: «Yo soy Yaveh. Yo os libraré de las cargas de Egipto y os libertaré de su esclavitud. Os redimiré con brazo extendido y con grandes actos justicieros.
(Job 19:25) 25 Pero yo sé que mi Redentor vive, y que al final se levantará sobre el polvo.
(Salmos 19:14) 14 Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, oh Yaveh, Roca mía y Redentor mío.
(Salmos 69:18) 18 Acércate a mi alma y redímela; líbrame a causa de mis enemigos.
(Salmos 72:14) 14 De la opresión y de la violencia redimirá sus vidas; la sangre de ellos será preciosa a sus ojos.
(Salmos 74:2) 2 Acuérdate de tu congregación que adquiriste en tiempos antiguos, y redimiste para que sea la tribu de tu heredad: este monte Sion en el cual has habitado.
(Salmos 77:15) 15 Con tu brazo has redimido a tu pueblo, a los hijos de Jacob y de José. (Selah)
(Salmos 78:35) 35 Se acordaron de que Dios es su Roca; de que el Dios Altísimo es su Redentor.
(Salmos 103:4) 4 el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y de misericordia;
(Salmos 106:10) 10 Los libró del enemigo; los rescató de mano del adversario.
(Salmos 107:2) 2 Díganlo los redimidos de Yaveh, los que ha redimido del poder del enemigo
(Salmos 119:154) 154 Aboga mi causa y redímeme; vivifícame conforme a tu palabra.
(Proverbios 23:11) 11 Porque su Redentor es fuerte; él defenderá contra ti la causa de ellos.
(Isaías 41:14) 14 No temas, gusanito de Jacob; vosotros, los poquitos de Israel. Yo soy tu socorro, dice Yaveh, tu Redentor, el Santo de Israel.
(Isaías 43:1) 1 Pero ahora, así ha dicho Yaveh, el que te creó, oh Jacob; el que te formó, oh Israel: «No temas, porque yo te he redimido. Te he llamado por tu nombre; tú eres mío.
(Isaías 43:14) 14 Así dice Yaveh, vuestro Redentor , el Santo de Israel: «Por vuestra causa enviaré a Babilonia, y haré descender a todos como fugitivos; y aun a los caldeos en sus naves de placer.
(Isaías 44:6) 6 Así ha dicho Yaveh, Rey de Israel, y su Redentor, Yaveh de los Ejércitos: «Yo soy el primero y yo soy el último, y fuera de mí no hay Dios.
(Isaías 44:22) 22 He borrado como niebla tus rebeliones, y como nube tus pecados. Vuelve a mí, porque yo te he redimido.»
(Isaías 44:24) 24 Así ha dicho Yaveh, tu Redentor; el que te formó desde el vientre: «Yo, Yaveh, hago todas las cosas. Yo solo despliego los cielos y extiendo la tierra, sin la ayuda de nadie.
(Isaías 47:4) 4 dice nuestro Redentor, cuyo nombre es Yaveh de los Ejércitos, el Santo de Israel.
(Isaías 48:17) 17 Así ha dicho Yaveh, tu Redentor, el Santo de Israel: «Yo soy Yaveh tu Dios que te enseña provechosamente, y que te conduce por el camino en que has de andar.
(Isaías 48:20) 20 «¡Salid de Babilonia! ¡Huid de entre los caldeos! Anunciad esto con voz de alegría; hacedlo oír. Difundidlo hasta el extremo de la tierra. Decid: «Yaveh ha redimido a su siervo Jacob.’
(Isaías 49:7) 7 Así ha dicho Yaveh, el Redentor de Israel y el Santo suyo, al de alma menospreciada, al abominado por las naciones, al siervo de los tiranos: «Los reyes lo verán y se levantarán; también los príncipes, y se postrarán, a causa de Yaveh, quien es fiel, y por el Santo de Israel, el cual te escogió.»
(Isaías 49:26) 26 A los que te oprimen, les haré comer sus propias carnes; se embriagarán con su propia sangre, como con vino nuevo. Y sabrá todo mortal que yo soy Yaveh tu Salvador, tu Redentor , el Fuerte de Jacob.»
(Isaías 52:9) 9 Prorrumpid juntas con gritos de júbilo, oh ruinas de Jerusalén, porque Yaveh ha consolado a su pueblo; ha redimido a Jerusalén.
(Isaías 54:5) 5 Porque tu marido es tu Hacedor; Yaveh de los Ejércitos es su nombre. Tu Redentor, el Santo de Israel, será llamado Dios de toda la tierra.
(Isaías 54:8) 8 Al desbordarse mi ira, escondí de ti mi rostro por un momento; pero con misericordia eterna me compadeceré de ti, dice tu Redentor Yaveh.
(Isaías 59:20) 20 Entonces el Redentor vendrá a Sion. Y a los de Jacob que se arrepientan de la transgresión, Yaveh les dice:
(Isaías 60:16) 16 Mamarás la leche de las naciones; mamarás el pecho de los reyes. Así conocerás que yo, Yaveh, soy tu Salvador y tu Redentor, el Fuerte de Jacob.
(Isaías 62:12) 12 Entonces les llamarán Pueblo Santo, Redimidos de Yaveh. Y a ti te llamarán Buscada, Ciudad No Desamparada.
(Isaías 63:4) 4 Porque el día de la venganza ha estado en mi corazón, y el año de de mis redimidos ha llegado.
(Isaías 63:9) 9 En toda la angustia de ellos, él fue angustiado; y el ángel de su Presencia los salvó. En su amor y en su compasión los redimió. Los alzó y los llevó todos los días de la antigüuedad.
(Isaías 63:16) 16 Pero tú eres nuestro Padre; aunque Abraham no nos conozca e Israel no nos reconozca, tú, oh Yaveh, eres nuestro Padre. Desde la eternidad tu nombre es Redentor Nuestro.
(Jeremías 30:11) 11 Porque yo estoy contigo para salvarte, dice Yaveh. Ciertamente haré exterminio en todas las naciones entre las cuales te he dispersado; pero en ti no haré exterminio, sino que te castigaré con justicia. De ninguna manera te daré por inocente.
(Jeremías 31:11) 11 Porque Yaveh ha rescatado a Jacob; lo ha redimido de mano del que es más fuerte que él.
(Jeremías 50:34) 34 Pero su Redentor es fuerte; Yaveh de los Ejércitos es su nombre. Ciertamente abogará por la causa de ellos para hacer reposar la tierra y turbar a los habitantes de Babilonia.
(Lamentaciones 3:58) 58 «Tú has abogado, oh Señor, por la causa de mi alma; has redimido mi vida.
(Oseas 13:14) 14 ¿Los redimiré del poder del Seol? ¿Los rescataré de la Muerte? ¿Dónde está, oh Muerte, tu espina? ¿Dónde está, oh Seol, tu aguijón? La compasión se ha ocultado de mis ojos.
(Miqueas 4:10) 10 Sufre dolor y gime como una mujer que da a luz, oh hija de Sion, porque ahora saldrás de la ciudad, habitarás en el campo y llegarás hasta Babilonia. Allí serás librada, y allí te redimirá Yaveh de la mano de tus enemigos.
Padah (37/64)
(Deuteronomio 7:8) 8 Es porque Yaveh os ama y guarda el juramento que hizo a vuestros padres, que os ha sacado de Egipto con mano poderosa y os ha rescatado de la casa de esclavitud, de mano del faraón, rey de Egipto.
(Deuteronomio 9:26) 26 Oré a Yaveh diciendo: Oh, Señor Yaveh, no destruyas a tu pueblo, a tu heredad que has rescatado por tu grandeza, al cual sacaste de Egipto con mano poderosa.
(Deuteronomio 13:5) 5 Pero tal profeta o tal soñador de sueños ha de ser muerto, porque predicó la rebelión contra Yaveh vuestro Dios que te sacó de la tierra de Egipto y te rescató de la casa de esclavitud. El trató de desviarte del camino por el que Yaveh tu Dios te mandó andar. Así eliminarás el mal de en medio de ti.
(Deuteronomio 15:15) 15 Te acordarás de que fuiste esclavo en la tierra de Egipto, y que Yaveh tu Dios te rescató. Por eso, yo te mando esto hoy.
(Deuteronomio 21:8) 8 Oh Yaveh, perdona a tu pueblo Israel al cual has redimido. No traigas culpa de sangre inocente en medio de tu pueblo Israel.’ Así les será perdonada la culpa de sangre.
(Deuteronomio 24:18) 18 Más bien, acuérdate de que fuiste esclavo en Egipto y que de allí te rescató Yaveh tu Dios. Por eso yo te mando que hagas esto.
(2 de Samuel 4:9) 9 Pero David respondió a Recab y a Baaná, su hermano, hijos de Rimón de Beerot, y les dijo: –¡Vive Yaveh, que ha rescatado mi vida de toda adversidad!
(2 de Samuel 7:23) 23 «¿Y qué otra nación hay en la tierra como tu pueblo Israel, al cual Dios fue para rescatarlo como pueblo para sí, a fin de darse renombre y hacer a favor de él hechos grandes y temibles, al expulsar las naciones y sus dioses ante tu pueblo que rescataste para ti de Egipto?
(1 de los Reyes 1:29) 29 Y el rey juró diciendo: –¡Vive Yaveh que rescató mi alma de toda adversidad,
(1 de Crónicas 17:21) 21 «¿Y qué otra nación hay en la tierra como tu pueblo Israel, al cual Dios fue para rescatarlo como pueblo para sí, a fin de darte renombre mediante hechos grandes y temibles, al expulsar las naciones ante tu pueblo que rescataste de Egipto?
(Nehemías 1:10) 10 Ellos son tus siervos y tu pueblo, a quienes redimiste con tu gran poder y con tu poderosa mano.
(Job 5:20) 20 En el hambre te redimirá de la muerte; y en la guerra, del poder de la espada.
(Job 6:23) 23 o: «Libradme de la mano del enemigo», o: «Rescatadme de la mano de los violentos»?
(Job 33:28) 28 El libró mi alma de pasar a la fosa, y mi vida verá la luz.»
(Salmos 25:22) 22 Redime, oh Dios, a Israel de todas sus angustias.
(Salmos 26:11) 11 Pero yo andaré en mi integridad; redímeme y ten misericordia de mí.
(Salmos 31:5) 5 En tus manos encomiendo mi espíritu; tú me has redimido, oh Yaveh, Dios de verdad.
(Salmos 34:22) 22 Yaveh redimirá el alma de sus siervos. No serán desolados cuantos confían en él.
(Salmos 44:26) 26 Levántate, socórrenos y redímenos por tu misericordia.
(Salmos 49:15) 15 Pero Dios redimirá mi vida del poder del Seol, porque me llevará consigo. (Selah)
(Salmos 55:18) 18 Ha rescatado en paz mi alma de la guerra que han desatado en contra de mí, aunque son muchos los que han estado contra mí.
(Salmos 69:18) 18 Acércate a mi alma y redímela; líbrame a causa de mis enemigos.
(Salmos 71:23) 23 Mis labios se alegrarán, cuando yo te cante salmos; aun mi alma, a la cual has redimido.
(Salmos 78:42) 42 No se acordaron de su mano en el día que los redimió del adversario,
(Salmos 119:134) 134 Rescátame de la violencia de los hombres, y guardaré tus mandamientos.
(Salmos 130:8) 8 El redimirá a Israel de todos sus pecados.
(Isaías 1:27) 27 Sion será redimida con el derecho, y sus arrepentidos con la justicia.
(Isaías 29:22) 22 Por tanto, Yaveh, que redimió a Abraham, ha dicho así a la casa de Jacob: «Ahora Jacob no será avergonzado más, ni tampoco palidecerá ahora su rostro.
(Isaías 35:10) 10 Los rescatados de Yaveh volverán y entrarán en Sion con cánticos. Y sobre sus cabezas habrá alegría perpetua. Alcanzarán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido.
(Isaías 51:11) 11 «Los rescatados de Yaveh volverán y entrarán en Sion con cánticos. Y sobre sus cabezas habrá alegría perpetua. Alcanzarán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido.
(Jeremías 15:21) 21 Te libraré de la mano de los malos, y te rescataré de la mano de los tiranos.
(Jeremías 31:11) 11 Porque Yaveh ha rescatado a Jacob; lo ha redimido de mano del que es más fuerte que él.
(Oseas 7:13) 13 ¡Ay de ellos, porque se apartaron de mí; destrucción vendrá sobre ellos, porque contra mí se rebelaron; yo los redimí, y ellos hablaron mentiras contra mí.
(Oseas 13:14) 14 ¿Los redimiré del poder del Seol? ¿Los rescataré de la Muerte? ¿Dónde está, oh Muerte, tu espina? ¿Dónde está, oh Seol, tu aguijón? La compasión se ha ocultado de mis ojos.
(Miqueas 6:4) 4 Yo te hice subir de la tierra de Egipto. De la casa de esclavitud te redimí y envié delante de ti a Moisés, a Aarón y a María.
(Zacarías 10:8) 8 Les llamaré con un silbido y los reuniré, porque los he redimido; y serán tan numerosos como lo fueron antes.
Peduth (4/4)
(Éxodo 8:23) 23 Yo haré distinción entre mi pueblo y el tuyo. Mañana tendrá lugar esta señal.»
(Salmos 111:9) 9 Ha enviado redención a su pueblo; para siempre ha ordenado su pacto. Santo y temible es su nombre.
(Salmos 130:7) 7 Oh Israel, pon tu esperanza en Yaveh, porque en Yaveh hay misericordia, y en él hay abundante redención.
(Isaías 50:2) 2 «¿Por qué vine, y nadie apareció? ¿Por qué llamé, y nadie respondió? ¿Acaso es demasiado corto mi mano que no pueda rescatar? ¿Acaso no hay en mí fuerzas para librar? He aquí que con mi reprensión haré que el mar se seque; convertiré los ríos en desierto hasta que se pudran sus peces y se mueran de sed por falta de agua.
Antilutron (1/1)
(1 a Timoteo 2:6) 6 quien se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.
Eluthero (3/7)
(S. Juan 8:36) 36 Así que, si el Hijo os hace libres, seréis verdaderamente libres.
(A los Romanos 8:2) 2 porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
(A los Gálatas 5:1) 1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no os pongáis otra vez bajo el yugo de la esclavitud.
Exagorazo (2/4)
(A los Gálatas 3:13) 13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),
(A los Gálatas 4:5) 5 para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.
Agorazo (6/31)
(1 a los Corintios 6:20) 20 Pues habéis sido comprados por precio. Por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo.
(1 a los Corintios 7:23) 23 Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres.
(2 de S. Pedro 2:1) 1 y aun negarán el Señor que los rescató , atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
(Apocalipsis 5:9) 9 Ellos entonaban un cántico nuevo, diciendo: «¡Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos! Porque tú fuiste inmolado y con tu sangre has redimido para Dios gente de toda raza, lengua, pueblo y nación.
(Apocalipsis 14:3-4) 3 Ellos cantan un himno nuevo delante del trono y en presencia de los cuatro seres vivientes y de los ancianos. Nadie podía aprender el himno, sino sólo los 144.000, quienes habían sido redimidos de la tierra. 4 Estos son los que nunca se mancharon con mujeres, pues son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que vaya. Estos fueron redimidos de entre los hombres, primicias para Dios y para el Cordero.
Apolutrosis (6/10)
(S. Lucas 21:28) 28 Cuando estas cosas comiencen a suceder, mirad y levantad vuestras cabezas; porque vuestra redención está cerca.
(A los Romanos 3:24) 24 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús.
(1 a los Corintios 1:30) 30 Por él estáis vosotros en Cristo Jesús, a quien Dios hizo para nosotros sabiduría, justificación, santificación y redención;
(A los Efesios 1:7) 7 En él tenemos redención por medio de su sangre, el perdón de nuestras transgresiones, según las riquezas de su gracia
(A los Colosenses 1:14) 14 en quien tenemos redención, el perdón de los pecados.
(A los Hebreos 9:15) 15 Por esta razón, también es mediador del nuevo pacto, para que los que han sido llamados reciban la promesa de la herencia eterna, ya que intervino muerte para redimirlos de las transgresiones bajo el primer pacto.
Lutroo (3/3)
(S. Lucas 24:21) 21 Nosotros esperábamos que él era el que habría de redimir a Israel. Ahora, a todo esto se añade el hecho de que hoy es el tercer día desde que esto aconteció.
(A Tito 2:14) 14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí mismo un pueblo propio, celoso de buenas obras.
(1 de S. Pedro 1:18) 18 Tened presente que habéis sido rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual heredasteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles como oro o plata,
Lutrosis (3/3)
(S. Lucas 1:68) 68 –Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo.
(S. Lucas 2:38) 38 En la misma hora acudió al templo y daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalén.
(A los Hebreos 9:12) 12 entró una vez para siempre en el lugar santísimo, logrando así eterna redención, ya no mediante sangre de machos cabríos ni de becerros, sino mediante su propia sangre.
Lutron (2(2)
(S. Mateo 20:28) 28 De la misma manera, el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.
(S. Marcos 10:45) 45 Porque el Hijo del Hombre tampoco vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.